Magic Mike, de Steven Soderbergh

Mike (Channing Tatum) es un emprendedor que pasa los días persiguiendo el “american dream” (sueño americano) de todas las formas posibles a su alcance: reparando los tejados de las casas, lavando coches o diseñando muebles en su apartamento de la playa de Tampa. Pero, por la noche… Mike se convierte en simplemente… mágico.

Estrella de un espectáculo masculino, Magic Mike, gracias a su estilo original y a su forma excepcional de bailar, es desde hace unos años la atracción principal del club Xquisite. Y cuanto más gusta a las mujeres, más gastan estas y más contento está Dallas (Matthew McConaughey), el propietario del local.

Mike, que intuye las posibilidades de un joven de diecinueve años al que llama el Niño (Alex Pettyfer), lo toma bajo su protección y lo inicia en las artes de bailar, animar una fiesta, seducir a las mujeres y hacer dinero fácil. No pasa mucho tiempo antes de que la nueva atracción del club empiece a tener a sus propias admiradoras.

Mientras, Mike conoce a la hermana del Niño, Brooke (Cody Horn), tan diferente de las otras chicas…

Magic Mike, de Steven Soderbergh
USA. 2012. 110 min.
Intérpretes: Channing Tatum (Mike), Alex Pettyfer (Adam), Matthew McConaughey (Dallas), Matt Bomer (Ken), Adam Rodriguez (Tito), Olivia Munn (Joanna), Cody Horn (Brooke), Joe Manganiello (Big Dick Richie), Riley KEough (Zora), Kevin Nash (Tarzán), Gabriel Iglesias (Tobías)
Guion: Reid Carolin
Fotografía: Peter Andrews
Montaje: Mary Ann Bernard
Producción: Reid Carolin, Gregory Jacobs, Channing Tatum, Nick Wechsler.
Distribuidora: Alta Classics

Director:

En el año 2000, Steven Soderbergh recibió un Oscar al Mejor Director por Traffic. Ese mismo año consiguió una segunda nominación al Mejor Director por Erin Brockovich, cuya protagonista, Julia Roberts, ganó el Oscar por su interpretación en la película. Ya antes, Soderbergh había conseguido una nominación al Oscar al Mejor Guión Original por Sexo, mentiras y cintas de vídeo, película con la que debutó en la dirección cinematográfica, que recibió la Palma de Oro en el Festival de Cannes de 1989.

Producción:

Channing Tatum llevaba tiempo dándole vueltas a la idea de ambientar una película en el mundo de los estríperes. Como él mismo había formado parte de ese mundo años atrás, sabía que tenía posibilidades cinematográficas en términos de comicidad, originalidad, entretenimiento… y revelaciones picantes. Pero MAGIC MIKE solo se convirtió en un proyecto destinado a la gran pantalla tras una charla con Steven Soderbergh. Tatum, protagonista y productor de la película comenta: «Le dije que había trabajado como estríper durante ocho meses cuando tenía dieciocho y diecinueve años. Siempre pensé que podría hacerse una historia basada en esa experiencia porque cada vez que surgía el tema la gente quería saber más: cómo entré en ese ambiente, cómo era, cuánto ganaba… Steven me dijo que debería hacerla, que tenía que escribir esa historia y que él la dirigiría».

«Pensé que era una de las mejores ideas para una película que yo había oído. Es sexi, divertida y un poco loca, y permite echar una ojeada a un ambiente interesante, exclusivo, que la mayor parte de la gente no pisa nunca», dice Soderbergh.

«Nunca había trabajado con nadie que tuviera un espíritu de colaboración tan fuerte, no solo colaborando sino potenciando a los actores y al resto del equipo para que hagan aportaciones útiles al proyecto a partir de las ideas de todos ellos», comenta Tatum refiriéndose a Soderbergh, que le dirigió el año pasado en Haywire (Indomable). Fue durante una de esas sesiones conjuntas cuando el director sugirió darle a la historia una perspectiva doble, situando junto al protagonista al personaje de diecinueve años Adam, el Niño, para que representara mejor el punto de vista del joven Tatum, que, en cambio hace el papel de su mentor, el treintañero Mike. Dice Channing Tatum: «Lo que quería reflejar era la atmósfera y la energía de aquella época, y la sensación de estar en ese momento de la vida en el que experimentas cosas y estás dispuesto a hacer lo que sea. Puede incluso que tengas planes para el futuro, pero de momento lo que cuenta es la próxima paga, la próxima fiesta, y divertirse». Y comenta: «Ninguno de los personajes se basa en una persona real, ni siquiera el mío. Fue una elección que todo lo que sucede sea ficción, porque queríamos tener libertad para crear determinadas situaciones y contar la historia mejor».

El productor Reid Carolin dice: «Me parece que es posible que la vida de Channing haya sido mucho más loca de como podría haberla contado esta película. Si hubiéramos incluido hechos reales nadie nos habría creído. Queríamos que fuera la historia creíble de la experiencia de un chico que lucha por permanecer a flote, pero que también tuviera momentos casi surrealistas, como aquellos en los que en los fines de semana se arranca la ropa y baila en una habitación llena de mujeres chillando».

A los dieciocho años, Tatumse dedicaba a mil trabajos temporales mientras trataba de ingeniárselas para encontrar el siguiente cuando oyó un anuncio en la radio que buscaba chicos a los que les gustara bailar e hizo una prueba para un espectáculo solo de hombres. «Pensé que por qué no. Además podía bailar y me parecía que podría hacerlo algún tiempo para divertirme. Trabajaba dos horas y ganaba 150 dólares, a veces llegaba a los 600 semanales, que para mí en aquella época eran mucho dinero. Me divertía mucho lo que estaba relacionado con el espectáculo, aunque bailar en tanga puede ser una experiencia bastante humillante. Cuanto más sexi quieres parecer, más penoso resulta. Por eso lo mejor es tomarlo por el lado cómico. Los estríperes son los chicos más sencillos que te puedas imaginar. Si tienen que hacer el número del bombero, harán la versión más trivial posible de un bombero, pero a las mujeres les encanta: chillan y se ríen y les ponen billetes en la ropa. Era una locura. Nos sentíamos estrellas del rock».

En la película, la atracción principal, Magic Mike, garantiza el lleno en el Club Xquisite, regentado por Dallas, un exestríper que se ha convertido en un hábil gerente e interpretado por MatthewMcConaughey. Dallas había descubierto a Mike seis años antes, al verlo bailar con unos amigos, y lo animó para que perfeccionara su talento en plan profesional. «Ante todo, Dallas es un hombre de negocios, y siempre está atento para encontrar nuevas fuentes de ingreso», dice McConaughey.

De forma análoga, cuando Mike conoce a Adam (el Niño), interpretado por Alex Pettyfer, ofrece al ambicioso joven la posibilidad de hacer dinero rápido y practicar, por lo que a través del Niño el público de la película puede conocer la vida de los llamados Reyes de Tampa.

Las mujeres que llegan en grupos ruidosos, dispuestas a desmelenarse y a provocar a esos modelos de exagerada virilidad (bomberos, atletas, rebeldes y hombres uniformados) pueden entregarse a los sueños más salvajes con los ojos abiertos en un ambiente relativamente protegido de sentimientos de culpa. Pero en ciertos aspectos la fantasía desempeña un papel a ambos lados del escenario, y este es uno de los temas que afronta MAGIC MIKE. El productor Nick Wechsler dice: «Ser estríper es una forma de ganar bastante dinero, conocer mujeres y andar por ahí con tíos guais. No es nada malo. Pero puede convertirse en una droga que distorsione el sentido de la realidad: piensas que estás persiguiendo tus sueños y en realidad solo estás consumiendo una droga». La primera que lo percibe es la hermana del Niño, Brooke, interpretada por la principiante Cody Horn, que empieza a plantearle preguntas a Mike. Y a medida que la historia se va desarrollando durante un húmedo verano de Tampa (Florida), Adam se deja ir cada vez más detrás de su nueva vocación y avanzando en una dirección distinta de la de Mike, que, en cambio, empieza a reflexionar acerca de su propio futuro.

«Un auténtico manitas». Así describe Tatum a Mike, su personaje. «Es un chico honrado, lleno de energía y recursos, convencido de que la clave del éxito reside en poner la carne en el asador». Con ese fin, se las ingenia haciendo trabajos entre la construcción y la venta de coches y se exhibe todos los fines de semana como Magic Mike. Pero lo que más le gusta, el trabajo de sus sueños, no le da ni un céntimo: diseñar y fabricar muebles, piezas únicas que espera vender algún día, cuando el mercado le permita pedir un préstamo. En ese momento de su vida, su mayor éxito es ser Magic. Los clientes lo saben, los otros chicos del espectáculo lo saben, y también Dallas lo sabe. Desde hace años cuenta con la popularidad de Mike para consolidar el número de los fans de su local, a la espera de conquistar mercados más amplios, con el sobrentendido de que su bailarín número uno recibirá un mayor porcentaje de beneficios. Para Tatum, «si Mike es el capitán del equipo, Dallas es el entrenador. Nunca se sabe si Dallas en realidad quiere que Mike participe en los beneficios o no. Nunca miente a propósito: solo deja que Mike crea lo que quiera creer».

Exestríper que nunca ha perdido su amor por el escenario, Dallas conoce ese mundo a la perfección, y aunque ya no actúa sigue cortejando a su público trabajando como exuberante presentador del club. Dice McConaughey: «Era un estríper extraordinario y ahora él es el que dirige el espectáculo, tratando de mejorar los números e inventar cosas nuevas. Se ve a sí mismo como un visionario. Piensa que los chicos del grupo son sus chicos y que Mike es su hombre más importante, pero al mismo tiempo sabe que todo es una cuestión de beneficios. Con Dallas todo se reduce a una cuestión económica: quien más dinero le aporte se convierte en su estrella». Soderbergh comenta que «además de Tatum, Matthew fue el primero en incorporarse al reparto. Se involucró en cuanto supo que se estaba ideando esta película. En cuanto le dije cuál era su personaje, me contestó que sabía perfectamente cómo hacerlo y que lo considerara como uno de nosotros». McConaughey, que compara a Dallas con un embaucador, dice: «Su lado pragmático ya estaba presente en el guión. El otro aspecto era más místico, como si se moviera en un plano existencial muy personal», un matiz que el actor discutió con Soderbergh para mostrar la complejidad del personaje, y a veces para obtener un efecto cómico a pesar de que Dallas se lo toma terriblemente en serio. El hecho de que para trabajar utilice el espacio alquilado en el bar de un centro comercial y que sus bailarines se cambien en la cocina, o que ensayen los números del espectáculo en el gimnasio local, bajo la mirada de los empleados curiosos no le desanima ni hace que se desvanezcan sus sueños de gloria. Sabe reconocer el talento y se da cuenta de inmediato de las posibilidades de Adam cuando Mike se lo presenta una noche. El actor inglés Alex Pettyfer, que interpreta el papel de Adam, dice: «Me parece que en la vida de mucha gente hay un momento en el que no se quiere vivir con la familia y se busca alguna cosa excitante. Adam está en esa fase cuando conoce a Mike y entra en su mundo, un poco loco, que es perfecto para él porque representa la libertad y todo lo que desea.Y se lanza de cabeza a esa aventura». Adam es muy parecido a Mike pero se diferencia de este en que desde el principio está dispuesto a asumir más riesgos de lo que nunca había asumido Mike. Y ninguno está en una posición mejor que Mike para saber lo difícil que es tener las cosas controladas.

Junto a Channing Tatum y Alex Pettyfer, en el escenario están Matt Bomer, que interpreta a Ken, vestido como el famoso muñeco que anima a las chicas; Joe Manganiello, que interpreta a Pollón Richie, conocido por un número que no requiere ningún accesorio en escena aparte de aquel con el que está dotado por naturaleza; Kevin Nash, el salvaje Tarzán que se balancea por todo el escenario colgado de una liana, y Adam Rodriguez, que interpreta a Tito, con un número que da sabor latino al espectáculo. «Todos los chicos han estado muy bien y cada uno de ellos ha aportado su grano de arena. Queríamos actores que pudieran improvisar y ser divertidos, sin que fueran necesariamente buenos bailarines», dice Soderbergh.

Para la coreografía se escogiò a Alison Faulk de los Beat Freaks, que estuvo trabajando en el rodaje de MAGIC MIKE durante las pausas de su trabajo de supervisión de las coreografías de las giras mundiales de Britney Spears y Madonna.

En cuanto al personaje de Brooke, la hermana de Adam, con la que Mike empieza a pasar la mayor parte de su tiempo libre, lejos del club y de sus clientes habituales, Soderbergh eligió a Cody Horn: «Yo buscaba a alguien que reuniera una combinación adecuada de elementos y cuando vi su prueba me di cuenta de que era ella, porque tiene la combinación adecuada de energía, dulzura y fuerza. Es irresistible».