La 60 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) se inaugura con la proyección de Dheepan, director francés Jacques Audiard, que se alzó con la Palma de Oro en la pasada edición del Festival de Cine de Cannes. En la gala inaugural se hace entrega de la Espiga de Honor al que fue director del festival durante veinte años y que le dio sus principales señas de identidad, Fernando Lara, al que ha acompañado en el escenario el equipo de trabajo que le acompañó en su labor directiva y que aún continúa organizando el certamen. La música y el humor lo ponen Álex O’Dogherty y su banda La Bizarrería, que animan cada uno de los espacios de la gala de inauguración del Certamen, que finalizará el próximo sábado y que proyectará más de 270 películas entre largometrajes y cortos. Los padrinos de esta edición son José Sacristán e Ingrid García Jonsson, que leen la tradicional carta del director del Festival, Javier Angulo. En el texto, el director reflexiona que en estos años «lo único que ha cambiado poco es el cine de autor o artístico, rodado por directores casi siempre guionistas con una visión muy particular de la realidad que cuentan historias creíbles sin concesiones ni atajos y capaces de conmover al espectador porque los sentimientos funcionan al margen de la tecnología«. Por el escenario del Teatro Calderón de Valladolid, desfilan, entre otros, Robert Guediguian, que presenta en esta edición su película Una historia de locos, la realizadora Naomi Kawase, que acerca a Seminci Una pastelería de Tokio o Goran Paskaljevic, presidente del jurado de la sección oficial de la sesenta edición y el único realizador con tres Espigas de Oro. En la jornada inaugural también se puede ver, fuera de concurso, Incidencias, de José Corbacho y Juan Cruz en la que reivindican la comedia como un «ejercicio de higiene» para con ellos mismos y con el público.
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