Berlinale – día 6

No es muy común la presencia del cine de nacionalidad portuguesa en los Festivales de Cine. Si exceptuamos a Manoel de Oliveira, son contados los cineastas seleccionados por las muestras internacionales de cinematografía. La presente jornada de la Berlinale ha abierto las puertas a Tabú, tercer largo de Miguel Gomes que es una conmovedora historia de amor, en blanco y negro, ambientada en el paraíso perdido colonial africano. «Preparé mi filme con mozambiqueños en Portugal, hay una relación de afecto entre mi película y esas personas, mucha “saudade”, mucho amor«, explica el director, y añade que «es puramente cine romántico, sí. Lo que no le evita una visión desapasionada tanto del colonialismo como de lo que vino después«. Dividido en dos capítulos desiguales, «Paraíso» y «Paraíso perdido», precedidos por un prólogo relata la historia de Pilar (Teresa Madurga), una lisboeta que vive para el prójimo.

La otra producción a concurso es Was bleibt, de Hans-Christian Schmid, segunda de las producciones alemanas en competición tras Barbara, de Christian Petzold. Interpretada por Nina Hoss, que ya encabeza la lista de favoritos al Oso de Plata, versa sobre un rico y exitoso editor con un hijo escritor y otro dentista, y una mujer que desde hace 30 años combate una depresión recurrente con pastillas y acupuntura.

Pero la estrella de la jornada es Meryl Streep, quien recibe el Oso de Oro de Honor en la sesión de gala de esta noche. La actriz asegura que «lo más difícil para un actor es presentarse cada vez con una interpretación más nueva, fresca y sorprendente que las anteriores«. El homenaje se complementa con el estreno en Alemania de La dama de hierro y, en relación con el personaje que interpreta Streep comenta que «lo que pienso de Margaret Thatcher es lo que piensa cualquier persona de ideas de izquierda moderada que vive en Nueva York, o sea que era una amiga de Ronald Reagan, que destruyó los sindicatos obreros y llevó adelante una política liberal que enriqueció a unos pocos y empobreció a muchos. Pero eso no quiere decir que no haya apreciado algunos aspectos de su política como por ejemplo que fue una feminista a pesar suyo, que contribuyó a abrir las puertas del poder a muchas mujeres y, sin tomar posición sobre el aborto, reconoció el derecho de la mujer de decidir si llevar adelante la maternidad o no«.(14/02/12)