De entre las tres producciones presentadas hoy en la Seminci destaca La madre, del vallisoletano Alberto Morais, que centra su historia en Miguel, encarnado brillantemente por el debutante Javier Mendo, como un crío de catorce años a punto de volver a entrar en un centro de menores ya que su madre, sin trabajo y con una vida personal inestable, es incapaz de ocuparse de él. Morais señala que «quería intentar dar fe de la guerra económica, que algunos llaman crisis, de una madre que no se puede ocupar de su hijo y un hijo que tiene que hacerse mayor demasiado pronto«. También se proyecta Aquarius, protagonizada por Sonia Braga, que es el segundo largo de Kleber Mendonça Filho. En la cinta Doña Clara es una viuda y excrítica musical de 65 años que nació en el seno de una familia adinerada y tradicional de Recife (Brasil), y es la última residente del Aquarius, un original edificio de dos pisos construido en la década de los 40 sobre el lujoso paseo marítimo. Un importante promotor ha comprado todos los apartamentos, pero ella se niega a vender el suyo y emprende una guerra fría contra la empresa que la acosa. Además, la colombiana La ciénaga, ópera prima del coproductor, guionista y actor Manolo Cruz que codirige junto a Carlos del Castillo se centra en Alberto un joven de veintiocho años que padece un trastorno neurológico que le mantiene postrado en su cama bajo la protección y los amorosos cuidados de su madre Rosa. Por último, Chema Prado, exdirector de la Filmoteca Española, recibe el homenaje de la Seminci con la concesión de una de sus Espigas de Oro de Honor. El otro reconocimiento tiene como protagonista a la veterana actriz Geraldine Chaplin.
crónica de cine